Recuperación financiera después de una catástrofe natural

Estos son los pasos que debes seguir para poner orden a tu situación financiera, antes y después de una catástrofe. 

Principales conclusiones

✓  Documenta tus pérdidas al detalle para reclamárselas al seguro. 

✓  Es probable que cumplas con los requisitos para recibir fondos del Gobierno que te ayuden a pagar los gastos que no cubra tu seguro. 

✓  Si tienes dificultades para pagar tu hipoteca, llama a la institución hipotecaria de inmediato.  

Todos podemos vernos afectados por catástrofes naturales como inundaciones, huracanes, tornados, incendios forestales o terremotos. Los estragos pueden ser importantes, tanto desde el punto de vista emocional como desde el financiero. Puedes sufrir daños en tu casa, en tu negocio o en otras propiedades personales y, si no puedes volver a trabajar enseguida, podría conllevar una gran alteración en tus ingresos. 

Muchas personas no están del todo preparadas ante una emergencia y no han hecho nunca nada por estar preparadas financieramente ante una catástrofe natural. Elaborar una planificación financiera como preparación para catástrofes es un paso decisivo que todo el mundo debería llevar a cabo ya mismo. 

Para lidiar con las consecuencias de una catástrofe natural, hace falta tener una estrategia específica. Los siguientes consejos pueden ayudarte a recuperarte.

Qué hacer si tu residencia ha sufrido daños 

En las horas y los días siguientes a una catástrofe natural, quizá encuentres un lugar donde vivir gracias a un amigo o familiar, o puedas acudir a un refugio de emergencia. Si tu casa ha sufrido daños graves o te enfrentas a una amenaza constante, como un incendio forestal cercano, tal vez necesites buscar una vivienda para vivir a largo plazo. Ponte en contacto con tu agencia local de gestión de emergencias para que te ayude a encontrar un lugar donde quedarte. 

Una vez se haya declarado la catástrofe, puede que cumplas con los requisitos para recibir fondos del Gobierno que cubran los gastos de hotel mientras buscas una vivienda, y que estos cubran otros gastos hasta que puedas volver a tu casa. 

Dato importante: puede que exista una cobertura específica por no poder volver a utilizar tu casa. Para asegurarte de no perder prestaciones financieras valiosas, pídele a tu compañía de seguros los datos específicos sobre cómo funciona el proceso de reclamaciones, infórmate sobre la documentación necesaria y si se necesita alguna aprobación previa.

El proceso de reclamaciones al seguro 

Tanto si cuentas con un seguro de hogar, un seguro de alquiler o un seguro de empresa, en caso de que se produzca una catástrofe natural, ponte en contacto con tu compañía de seguros a la mayor brevedad. Aunque no conozcas al detalle los daños que has sufrido, es conveniente que apuntes tu número de reclamación para poder usarlo como referencia en futuras llamadas. 

Sigue estos tres pasos:

  1. Confirma que tu póliza cubre los daños. En función del mercado y la normativa local, las pólizas de seguro de hogar podrían no cubrir inundaciones y terremotos, por ejemplo, y para ello podría ser necesario contratar una cobertura adicional. 
  2. Pregunta cuánto tiempo tienes para presentar una reclamación y qué documentación exige la compañía de seguros. 
  3. Elabora un inventario de bienes perdidos o dañados y guarda los recibos de los gastos relacionados con la catástrofe o con la recuperación, porque puede que los necesites para la reclamación. 

Recuerda que las compañías de seguros tienen que procesar un gran volumen de reclamaciones una vez se produce una catástrofe. Recibir un pago puede tardar varios meses o incluso más de un año. 

Compensación de ingresos perdidos 

Entre los gastos de emergencia y los salarios perdidos, las catástrofes naturales pueden afectar mucho a tu flujo de efectivo. Si bien Fidelity recomienda crear un fondo de emergencia con una cantidad equivalente a entre tres y seis meses de gastos, es probable que no cuentes con ese colchón —o quizá no te resulte suficiente para cubrir tus necesidades—. 

A continuación se enumeran otras opciones que dispones para hacer frente a una pérdida de ingresos:

  • Subsidio por desempleo. Si hay una interrupción en tu trabajo, lo pierdes o debes cerrar tu negocio debido a una catástrofe, es probable que puedas solicitar prestaciones por desempleo que se lleven a cabo mediante programas gubernamentales. 
  • Subsidios de emergencia. Las personas físicas podrían ser elegibles para recibir fondos del Gobierno local o de organismos privados que les ayuden a pagar alimentos, servicios, facturas médicas, limpieza y otros gastos que los seguros no cubran. 
  • Reembolsos por dificultades económicas. Si el plan de pensiones de la empresa donde trabajas te lo permite, tal vez puedas sacar un préstamo del plan de pensiones para hacer frente a las pérdidas que no cubran tu seguro, tus ahorros habituales u otros fondos de asistencia. En cualquier caso, toma esta opción como un último recurso, ya que es posible que debas pagar impuestos sobre los ingresos o alguna penalización por el reembolso, perdiendo así el incremento potencial de ese dinero.

Gestión de pagos de hipoteca 

Incluso cuando no puedas quedarte en tu casa porque esté demasiado dañada o se haya destruido por completo, la hipoteca debe pagarse igual. Si estás teniendo dificultades para hacer frente a los diferentes pagos, habla lo antes posible con la institución que administre tu hipoteca y averigua si te ofrece alguna alternativa para retrasar los pagos del préstamo, no cobrarte intereses por retraso en el pago o reducir o interrumpir los pagos durante un tiempo.  

Reemplazo de documentos perdidos 

Cuando se produce una catástrofe natural, es común perder documentación esencial. Si no la recuperas, podría ocasionar problemas a la larga, tiempo después de haberte recuperado del daño material. Como preparación para estos casos, plantéate la posibilidad de guardar los documentos originales importantes en la caja de seguridad de un banco u otra institución de confianza. Haz fotos o copias de la documentación esencial (como títulos de propiedad y pasaportes) y consérvalas en un lugar seguro de internet o en un lugar físico lejos de tu casa. Haz una lista de los documentos desaparecidos y después pídeles a los organismos y oficinas que los emitieron que te digan cómo conseguir una nueva copia. 

Algunos de los documentos esenciales de los que podrías necesitar una copia nueva son los siguientes: 

  • Acta de nacimiento. 
  • Permiso de conducir. 
  • Tarjeta de la Seguridad Social (si corresponde). 
  • Pasaporte: denuncia el extravío de tu carné o pasaporte y rellena el formulario para pedir uno nuevo. 

En el caso de otros documentos importantes, como tarjetas del seguro o extractos bancarios, es probable que tengas cuentas electrónicas donde se guarde esa información. Si necesita copias impresas o tarjetas físicas, ponte en contacto con las diferentes compañías para que te ayuden a reemplazar los documentos. 

Recupera tu vida 

Las catástrofes naturales pueden dejar tambaleando tanto a personas como a comunidades… y la recuperación suele ser un proceso largo. Si trabajas con un asesor financiero y fiscal, puedes tomar medidas para desgravar las pérdidas durante la reconstrucción de tu casa y de tu vida. Y si te enfrentas a dificultades financieras, pide ayuda. Aprovecha los programas de subsidios y las organizaciones de ayuda para que te puedan ayudar a recuperar tu vida lo antes posible. 

 

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